Para la campaña Viajero Diners, Andrés Cruz y su equipo desarrollaron una pieza audiovisual que transforma la reseña de un restaurante en una experiencia inmersiva, poética y local. Esta sinergia creativa reinterpretó el clásico formato review desde una mirada autoral, sensible y profundamente conectada con la ciudad de Quito. La dirección creativa apostó por un enfoque emocional: un storytelling y guion envolvente, edición detallada y tomas que capturan no solo sabores, sino memorias y atmósferas. El video invita a redescubrir Quito desde lo cotidiano y lo extraordinario, alineándose con una audiencia que ya no busca solo recomendaciones, sino conexiones. La pieza no solo posiciona al restaurante como destino, sino que enmarca la experiencia como parte del universo del viajero Diners: alguien que aprecia la calidad, la estética y el sentir de cada lugar. Esta colaboración evidencia cómo una marca puede encontrar nuevas formas de contar historias, más humanas, más cercanas, más memorables.